Mundillos para bolillos
La almohadilla o mundillo para bolillos es una herramienta fundamental en la elaboración de encaje de bolillos, esencial para cualquier encajera que desee crear piezas de alta calidad y precisión.
Un buen mundillo no solo facilita el trabajo, sino que también garantiza que los encajes mantengan su forma y detalle. En internet podéis encontrar multitud de libros y revistas donde podéis ver multitud de almohadillas y diseños. Yo empezaré por lo que creo que es lo principal: ¿Qué es?
¿Qué es un mundillos para bolillos?
El mundillo, o almohadilla, es un cojín cilíndrico, generalmente hecho de materiales firmes y duraderos, que se utiliza para sostener los hilos y los patrones mientras se teje el encaje. Su diseño permite que los bolillos, que son pequeñas herramientas cilíndricas donde se enrollan los hilos, se muevan con facilidad, lo que es crucial para la creación de patrones intrincados y detallados.
El material debe ser resistente pero a la vez permitir colocar los alfileres en cada punto de forma cómoda y precisa. Aunque no es común, su superficie firme y acolchada lo convierte en una herramienta versátil para mantener la tensión adecuada en proyectos de otras disciplinas como el punto de cruz.
Tipos de mundillos
Existen varios tipos de mundillos, cada uno adaptado a diferentes estilos de encaje y preferencias personales de cada bolillero:
- Mundillo de rollo: Ideal para trabajos largos y continuos, como mantillas y encajes de gran tamaño.
- Mundillo de mesa: Estable y amplio, proporciona una superficie de trabajo sólida para patrones complejos y detallados.
- Almohadas de bolillos verticales: Estas almohadas se utilizan en posición vertical, apoyadas sobre una encajera, una pared, un atril, una silla o una mesa. Son ideales para hacer encajes por metros. Existen almohadas verticales de bloques, que permiten subir la labor para hacer esquinas sin necesidad de levantarla del patrón, y también almohadas verticales con rodillo, muy útiles para trabajos largos.
- Mundillo de viaje: Las más pequeña suelen medir 49 x 33 cm y es perfecta para cuando queremos llevar nuestra labor de vacaciones o a un viaje donde estemos limitados por el espacio o el peso. Realmente, es una versión moderna adaptada de la que antaño se utilizaba para niños.
- Almohadas de bolillos horizontales o planas: Este tipo de almohada para bolillos se encuentra frecuentemente en países como Francia, Bélgica y el Reino Unido.
- Almohadas de bolillos cilíndricas o de rulo: Perfectas para labores pequeñas, ya que los bolillos cuelgan en una posición que facilita la tensión adecuada de los hilos.
¿Cómo hacer un mundillo casero?
Para hacer un mundillo casero para labores de encaje de bolillos, puedes seguir estos pasos básicos utilizando materiales accesibles y económicos. Antaño se utilizaban otros materiales como madera o paja pero actualmente podemos encontrar más ligeros y baratos. Aquí tenéis una guía resumida:
Materiales necesarios:
- Plancha de poliestireno extruido: Puedes encontrarlo en tiendas de bricolaje. Este material será la base del mundillo y se podría sustituir por un plástico similar.
- Forro de tela : Este material proporcionará la superficie acolchada necesaria para trabajar con comodidad sin que "escupa" los alfileres como pasa con las colchonetas de gimnasia o sin aportar la sujección correcta como con algodón.
- Cinta de doble cara: Para fijar las piezas juntas.
- Tijeras y serrucho: Para cortar el poliestireno y el forro de tela.
- Tela para la funda: Para cubrir el mundillo y darle un acabado profesional.
Instrucciones para hacer una almohadilla tradicional:
- Corte del forro:
Mide y corta un cuadrado de 40x40 cm de la plancha de poliestireno. Corta dos cuadrados de la misma medida del forro.
- Montaje:
Utiliza la cinta de doble cara para pegar una pieza de forro a cada lado del poliestireno. Asegúrate de que todo esté bien fijado y sin burbujas.
- Creación de la funda:
Corta dos piezas de tela de 42x42 cm y una tira de 7x170 cm. Cose las piezas para formar una funda y colócala sobre el mundillo.
- Finalización:
Si deseas, añade un asa en la parte superior para facilitar el transporte. Asegúrate de que la funda esté bien ajustada y sin arrugas.
Este proceso es sencillo y te permitirá tener un mundillo funcional y personalizado sin gastar mucho dinero. Pero para más comodidad os recomendamos crear uno redondo porque deben girarse en el curso de la labor y se adaptan mejor que las esquinas.
Aquí podéis ver otro de mis mundillos caseros. Lleva un soporte de quita y pon para acoplar mejor los bolillos y ,además, el rulo de este último puede sacarse y dentro de un cestillo ovalado, se utiliza para el encaje ruso.
Precio de un mundillo casero
El coste de los materiales, de media, no es mucho más bajo que si la compramos en una tienda. Pero tiene la ventaja de ser totalmente personalizada y a nuestro gusto. Estos serían los precios aproximados:
- Plancha de poliestireno extruido para la base: unos 10 €.
- Gomaespuma de alta densidad (relleno): aproximadamente 15 €.
- Tela para cubrir: alrededor de 5 €.
- Forro de tela: Unos 4 € el metro cuadrado.
- Herramientas y suministros adicionales (tijeras, serrucho, grapas, etc.): alrededor de 5 €.
El costo total de materiales para una almohadilla casera sería aproximadamente de 35 euros a lo que tenemos que sumar el tiempo que le dedicaremos y que tal vez no salga bien a la primera.
¿Por qué es importante elegir el mundillo adecuado?
Elegir el mundillo adecuado es fundamental para cualquier encajera de bolillos, ya que este instrumento es esencial para la precisión y calidad del trabajo de encaje. No es como una máquina de coser, en el encaje, la labor que queramos realizar y, o si nos vamos a desplazar, nos indicará si necesitamos una de mayor a menor envergadura.
Estabilidad y precisión
La estabilidad que proporciona un buen mundillo es crucial. Al mantener los hilos y el patrón en su lugar, permite que el encaje se realice con exactitud. Un mundillo inadecuado puede moverse o deformarse, causando errores en el diseño y haciendo que el trabajo sea más complicado y frustrante.
Comodidad y ergonomía
Trabajar con encaje de bolillos puede ser un proceso largo y detallado. La comodidad es esencial para evitar la fatiga y el dolor, especialmente en las muñecas y las manos.
Un mundillo adecuado debe ser ergonómico, permitiendo una postura cómoda y reduciendo la tensión durante las largas horas de trabajo.
Adaptación a diferentes proyectos
No todos los encajes son iguales, y cada proyecto puede requerir un tipo específico de mundillo. Un mundillo adecuado se adaptará a las necesidades del proyecto, ya sea que estés trabajando en un encaje largo y continuo, como una mantilla, o en un encaje pequeño y detallado.
Los diferentes tipos de mundillos, como los verticales, horizontales y cilíndricos, tienen características específicas que los hacen más adecuados para ciertos tipos de labores.
Proporciona estabilidad: Evita que los hilos se desplacen o que los patrones se deformen.
Las tres claves de una almohadilla de calidad
Facilita el movimiento de los bolillos: Permite una manipulación precisa y fluida de los hilos.
Es cómodo: Reduce la fatiga durante largas sesiones de trabajo.
Conservación del patrón y los materiales
Un mundillo de calidad protege el patrón y los materiales que utilizas. Hay que tener en cuenta que los hilos que utilizaremos en la labores son mucho más finos que los hilos de coser. Así que necesitamos que se mantenga los hilos en la tensión correcta y evita que se enreden o se dañen. Además, preserva la integridad del patrón, asegurando que el diseño final de tus labores sea exacto y limpio.
Mejora de la técnica
Finalmente, este soporte facilita el aprendizaje y la mejora continua de la técnica de encaje. Al proporcionar un soporte adecuado y permitir un manejo preciso de los bolillos, ayuda a las encajeras, tanto principiantes como expertas, a perfeccionar sus habilidades y a trabajar con mayor eficiencia y creatividad.
Cómo cuidar tu almohadilla
Para prolongar la vida útil de tu mundillo y asegurarte de que siempre esté en las mejores condiciones, sigue estos consejos:
- Mantenlo limpio: Evita que se ensucie con polvo o residuos de hilo.
- Guárdalo adecuadamente: Almacénalo en un lugar seco y protegido de la luz directa del sol.
- Revisa las costuras y el material: Asegúrate de que no haya desgastes o roturas que puedan afectar tu trabajo.
- Protégelo en tus viajes: Hazte con una buena bolsa para tu mundillo que te permite transportarlo con comodidad y a la vez lo proteja de roces o golpes.
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